¡Hola Tranceros! Bienvenidos a otra reseña más, el día de
hoy hablaremos de una novela cortita y bonita, que, aunque logro enternecerme me
dejó la sensación de que algo faltaba. ¿Qué será ese algo? No lo sé, pero
acompáñenme a ver si podemos descubrirlo. Hablemos de “Crenshaw” de Katherine
Applegate.
“Crenshaw” es la historia de Jackson, un pequeño demasiado
maduro para su edad que vive con sus padres, su hermana menor y su perra. Todo
parece ir bien hasta que un día se encuentra en el baño una visita inesperada,
alguien de su pasado que creía que se había ido para jamás volver: su antiguo
amigo imaginario, un enorme gato llamado Crenshaw. Aunque al principio Jackson
se niega a reconocer la existencia de Crenshaw, poco a poco se irá dando cuenta
de que hay una razón por la que su viejo amigo ha vuelto y esto se encuentra
muy ligado a que hay cosas que parecen no estar bien en la vida de sus padres.
Parece que hay problemas económicos y parece que pronto la familia tendrá que
volver a vivir una temporada en su coche, como paso tiempo atrás… justo la
primera vez que Crenshaw llegó. ¿Coincidencia? A lo largo de la lectura iremos descubriendo
la razón de que el enorme gato llegara y también seremos testigos de cómo
Jackson tendrá que enfrentar la verdad que durante tanto tiempo ha ocultado a
su familia y a sí mismo.
Debo decir que tenía mucha curiosidad de leer este libro,
especialmente porque no dejo de escuchar cosas buenísimas de la autora y su
anterior novela. Así que en cuanto tuve la oportunidad de que el libro llegara
a mis manos no lo pensé mucho y para ser totalmente honestos, admito que tengo
sentimientos encontrados. Por un lado, la historia tiene una moraleja realmente
hermosa y el trasfondo del libro es precioso, pero por otro lo sentí demasiado
corto. Me parece que, aunque la novela lleva el nombre de “Crenshaw” este
personaje se ve muy relegado gracias a la problemática de Jackson, me habría
gustado conocer más de la historia de ese gatito y saber un poco más de él
mismo, el personaje se siente inacabado y con un aire misterioso que hace
difícil empatizar con él y, al mismo tiempo, dentro de ese misterio reside la
magia del amigo imaginario que no sabemos de dónde viene o a donde va.
¿Entienden porque les digo que tengo sentimientos ambivalentes?
¿Significa, todo lo anterior, que el libro no me gusto? No,
al menos no para mí. Significa, simplemente, que esperaba algo más de este
libro, quería leer esa pluma tan emotiva de la que me habían hablado y quería
conocer a Crenshaw, ver la interacción con Jackson y sentir una atmosfera
mágica que realmente me conmoviera. No sentí nada de eso, pero si logré conocer
la pluma fresca y ágil de la autora, ver una forma diferente de abordar temas
difíciles y asimilar el mensaje final. Al final si disfrute el libro, pero no
me encariñe con los personajes, sentí un poco rápido el final y me quede con
ganas de conocer más de ese simpático gatote adorador de gomitas violetas. La
verdadera pregunta debería ser: ¿Volveré a leer algo de la autora?
Probablemente sí, pero mis expectativas ya no estarán tan altas.
En resumen, “Crenshaw” es una novela corta, fresca y rápida
de leer que utiliza el tema de los amigos imaginarios como una manera de
suavizar temas más fuertes y al final enseñarnos una bonita moraleja. Es una
historia tierna y en ocasiones triste, pero con una atmósfera muy especial.
Hola Annie!
ResponderEliminarEs la primera reseña que leo que no lo tiene por las nubes, a mí me gusta como escribe esta mujer. Adoré el libro de El único e incomparable Iván, espero poder hacerme pronto con el libro, yo quiero un amigo imaginario gatuno *w*!!
Saludos ^^