¡Hola Tranceros! ¿Hemos tenido muchas reseñas últimamente?
Les pido una disculpa si lo sienten así, con el Especial Patriótico y la
entrada de noticias atrasadas las reseñas se me acumularon y quiero sacarlas
todas esta semana para la siguiente semana retomar nuestro ritmo habitual.
Espero me comprendan ^o^
Hoy vamos a hablar de una novela que pensé que no me iba a
gustar pero que termino dejándome muy satisfecha con la lectura, me encantaron
las referencias a “El Fantasma de la Ópera” y en cuanto lo termine la súper
Abuelita Lectora lo robó de mis manos, hablemos de “Si el Amor es una Isla”
(Silence Hill #1) de Esther Saenz
“Si el Amor es una Isla” nos narra la historia de Luisa (o
Louise, dependiendo de donde se mire), una joven que acaba de ser contratada
como doncella en un hotel lujoso de una recóndita isla llamada Sark, por si se
lo preguntan el nombre del hotel es Silence Hill, la novela nos sitúa cuando
Louise llega a dicha isla para comenzar su contrato en el hotel, desde el
primer momento sabemos que ella necesita el trabajo para ayudar a su padre
quien sufre una enfermedad que no le permite trabajar y costear su tratamiento
médico, hay otra razón que impulsa a nuestra protagonista a huir de su hogar
pero esa se nos va desvelando poco a poco. Desde que Lou acepta el empleo de
Silence Hill se da cuenta que el lugar está regido por unas reglas muy
estrictas, tanto de vestimenta, comportamiento como del amo y señor del lugar,
el misterioso Patrick Groen. De él se cuentan muchas historias, que cubre su
rostro con una máscara debido a que resulto muy lastimado tras un accidente,
que es tan cruel y malvado como lo fue su difunto padre, que jamás sale del
hotel y lo maneja con mano de hierro, etc. Lo cierto es que al principio todo
ello parece ser cierto, pero poco a poco Luisa irá descubriendo más del
misterioso hotel y del fascinante dueño del mismo, todo ello aderezado por un
triángulo amoroso y un giro de la trama que hará que más de uno diga: “No lo vi
venir”.
Voy a admitirlo desde este momento: No esperaba que este
libro me gustará tanto. Pensé que sería una buena novela romántica que me
mantendría entretenida y me ayudaría a pasar de lectura en lectura (con esto me
refiero a esos libros ligeritos que te ayudan a pasar de un libro buenísimo a
otras lecturas que no les tienes tantas ganas) pero desde las primeras páginas
logro engancharme e intrigarme y quede totalmente picada con el libro, al punto
que lo termine en un día y medio (#Notengovidasocial) y quede enamorada de la
prosa de la autora. El giro que da la trama respecto a cierto triángulo amoroso
(que ya saben que no soy muy fan de ellos) es bastante interesante, no
original, pero sí muy bien llevado y realmente logra que digamos “wow” y, en mi
caso, releí todo el libro viendo ciertas escenas desde otra perspectiva. Por
otro lado, tenemos a unos personajes muy interesantes, Luisa no es una chica
tan sumisa y tranquila como otras protagonistas, que resultan algo sosas hay
que admitirlo, ella es muy valiente, explosiva, curiosa y hasta algo necia,
pero con todos estos defectos resulta más real y humana y nos hace sentir mayor
empatía hacia ella, Patrick resulta misterioso y oscuro, con un lado sexy y
algo vulnerable, desde que sabemos que utiliza una máscara y creemos conocer
las razones de por qué lo hace, se siente un cariño hacia el personaje y
también un ansía de conocer más de él y del verdadero hombre bajo dicha
máscara, también tenemos a Jim un joven cochero y escritor que parece tener
interés en nuestra protagonista y que parece tan misterioso, e incluso más, que
el propio Patrick. Solo menciono a los personajes principales pero la verdad es
que hasta los secundarios resultan interesantes porque se nota un perfil bien
trabajado en cada uno de ellos.
No quiero que piensen que está novela brilla por su
originalidad porque no es así. Es una historia romántica contemporánea con
ciertos clichés propios de su género, pero eso no significa que no sea una
novela que se siente fresca, amena y cuyos personajes sean lo suficientemente
interesantes para impulsar aún más la historia. La pluma de la autora y su
forma de narrar las escenas eróticas me ha sorprendido gratamente, yo no soy
una persona que guste de leer escenas tan explicitas porque siento que el
erotismo consiste en narrar de una forma bella y casi poética lo que ya sabemos
que sucederá, pero de alguna forma narrar más la unión de almas que de cuerpos.
Sé que suena raro, pero, al menos, así lo percibo yo.
En resumen, “Si el Amor es una Isla” es una novela romántica
con tintes de misterio que brilla por sus personajes bien trazados, la fresca y
hermosa pluma de su autora y, que sin llegar a ser un retelling, toma ciertos
elementos de “El fantasma de la ópera” y los usa para narrarnos una historia
tan hermosa como, en algunos párrafos, triste. ¡Altamente recomendable!
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