¡Hola Tranceros! Bienvenidos a una nueva reseña en el blog, hoy cerramos un capítulo de una saga que seguí desde hace años y que, al fin, ha llegado su final. Hablemos de Un Rey Verdadero (La Escuela del Bien y del Mal #6) de Soman Chainani
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¡Gracias a Ediciones Urano México por el ejemplar!
La primera prueba ha sido superada.
Sacaron a Excalibur de la piedra.
Nombraron un nuevo rey.
Pero dos reclaman la corona.
La espada regresa a la piedra,
porque solo uno es el rey verdadero.
¿Quién?
El futuro que he visto
tiene muchas posibilidades.
Así que declaro que ninguno sea coronado
hasta que el Torneo haya terminado.
El Torneo de Reyes.
Tres pruebas.
Una carrera hasta el final
Mi última prueba de coronación.
Excalibur coronará al ganador
y le cortará la cabeza al perdedor.
La primera prueba se aproxima. Preparaos.
¿De qué trata este libro? Por fin llegamos al final de una gran travesía en la que acompañamos a Sophie, Agatha, Tedros y compañía para descubrir qué hay detrás del famoso “y vivierón por siempre felices” y llegar al final de su épica saga para saber quién ganará, el bien o el mal. Después de la aparición de los misteriosos gemelos Rhian y Japeth, y de que Japeth tomará el trono usurpando el derecho de nacimiento de Tedros, nuestras heroínas y héroes se embarcan en la misión más peligrosa de todas: lograr que Tedros pueda reclamar su derecho al trono y sobrevivir a las pruebas impuestas por el Rey Arturo; a lo largo de la novela se nos irán revelando secretos sobre el origen de los gemelos, sobre la verdadera naturaleza de las pruebas de Arturo y sobre el mismo Tedros, datos e información que nos llevarán a descubrir quién es el Rey Verdadero. ¿Están listos para está épica conclusión?
“…Muchos de nosotros cometemos el error de negarnos lo que queremos. Por miedo a no merecerlo, y eso también es bueno…Pero las cosas que importan no se pueden compensar o mendigar. Son nuestro derecho de nacimiento por venir a este mundo. Debemos encontrarlas y aferrarnos a ellas, incluso si nos llevan a lo profundo del desierto, muy muy lejos de donde pensábamos que deberíamos estar…”
Hace varios años que me embarqué en la aventura y viaje que sería leer todos los libros de la escuela del bien y del mal, que ya me añadieron más gracias a las nuevas precuelas que cuentan el origen de la Escuela del Bien y del Mal pero meh, y nunca pensé que llegaría el momento en que lloraría leyendo el final y cerrando la última página de estos libros. Debo decir que no es la mejor saga de fantasía y que, los primeros libros, sobre todo, se sienten muy fuera de tiempo y un poco mal envejecidos, pero eso no implica que conforme las novelas avanzan se van volviendo más adultas y las lecciones que nos dejan resuenan cada ves más con etapas de nuestra vida que hemos vivido, estamos viviendo o viviremos. En un Rey Verdadero tenemos un cierre exquisito a toda una saga y a todos los personajes que poco a poco se fueron metiendo a nuestros corazones; cada uno de ellos tiene un crecimiento marcado y una historia que van dando cierre y se entrelazan para darnos un final que nos deja satisfechos, pero, al mismo tiempo, con una sensación de vacío al tener que decir adiós a personajes como Agatha, Sophie, Tedros, Merlín, incluso los villanos como Japeth nos dejan una marca en el corazón, así que sí, siempre es difícil decir adiós…
“…Y mientras tengas dudas sobre cómo luces, nunca serás capaz de amar de verdad a alguien…Mírame a mí. Aunque tengas al novio más amoroso, complaciente y digno de un cuento de hadas, rechazarás su amor si no crees merecerlo. Y si piensas eso, es demasiado fácil culpar a la apariencia o a algo más que no puedes controlar porque te da demasiado miedo cambiar la única cosa que está bajo tu control: cómo te sientes contigo misma…”
Para la conclusión de esta saga, el autor decide sumergirnos en una batalla entre dos posibles reyes, ya que el Rey Arturo decide poner a prueba a su heredero y lo hace a través de 3 pruebas que demostrarán quién es el más apto para gobernar Camelot, así que el Príncipe Tedros y Japeth, ambos aparentes herederos de Arturo, se embarcan en esta aventura, cada uno acompañado de su propio séquito, este cierre es ideal para la historia y el crecimiento del personaje de Tedros quién es un príncipe que no todo el mundo ama, o al menos creo que la mayoría de lectores no somos sus fans acérrimos, pero también es el escenario para dar cierre a otras historias, como el crecimiento y madurez de mi querida Sophie, a mi parecer quién más creció a lo largo de la historia y el personaje más adorable de todos estos libros, la conclusión de la historia de Agatha para que encuentre su papel de princesa y acepte la bondad de su corazón. Debo admitir que este libro ha sido de mis favoritos de la saga y que se quedará muchísimo rato en mi memoria y en mi corazón, también puede ser porque tiene las frases más bonitas de toda la saga y me dejo bastante satisfecha en cuanto al final de está épica saga, así que, en conclusión, de esta reseña y de la saga en general, Un Rey Verdadero es un verdadero deleite para los fans de estos libros, un cierre ideal para una fantástica saga llena de magia, aventuras, romance y más. Sin duda, el viaje que iniciamos hace años en compañía de Agatha, Tedros, Sophie y compañía tiene una conclusión digna y que le llegará al corazón a más de un lector. Espero, en el futuro, tener la oportunidad de continuar leyendo historia de este gran autor y, algún día, poder ver un cameo de mi querida Sophie en alguna otra historia. ¡Excelente lectura!
¡Felices Lecturas!
¡Hola! Ya es la segunda reseña que leo de este libro y me alegra mucho ver que está gustando tanto. Aunque decidí no seguir con ella, conocía a los personajes, me gustaron y me hace feliz que tengan un final digno. Un besote :)
ResponderEliminarHOLAAA
ResponderEliminarEmpece a leer el primer libro y no lo segui, si me llama la atencion pero no era el momento, estaba leyendo otro que me atrapo mas en el momento. Ya vere cuando empiezo de nuevo
Hola :)
ResponderEliminarTengo esta saga apuntada ya desde hace un tiempo y por unas cosas u otras, voy aplazando su lectura, pero este año me gustaría animarme con ella.
Besos