¡Hola Tranceros! ¡Feliz Jueves! Ya
casi se termina la semana y hoy hablaremos de una historia de
superación, de encontrarse a uno mismo despúes de una tragedia, una
historia de dolor y esperanza que le servirá a más de uno. Hablemos
de Bajo el Agua de Marisa Reichardt
Bajo el agua es la historia de una
joven llamada Morgan, ella siempre había sido una chica extrovertida
que salía con sus amigas y que amaba nadar, despreocupada de la vida
y de sonrisa fácil, pero un día lluvioso eso cambio, ella hizo
algo, que en realidad fue una buena acción, y que terminó en
tragedia. Además del trauma que implicó para ella, también esta el
hecho de que se siente tremendamente culpable pues ese suceso trágico
cobró varias vidas, Morgan ahora es una chica que tiene un gran
pavor a salir de su casa, que ha tenido que dejar los estudios
presenciales para hacer la escuela en línea y que no puede poner un
pie más allá de su puerta. Los único lugares seguros para Morgan
son su casa y el agua, estar bajo la regadera la calma y sumergirse
en la tina le recuerda tiempos mejores. Sin embargo todo parece
cambiar cuando un chico se muda al departamento de al lado, un joven
que le recuerda a los atardeceres en la playa y a la sensación de
estar en el agua, un joven que puede ser la clave para que Morgan
salga a flote y pueda respirar libremente de nuevo. ¿Logrará
superar su trauma? ¿Qué suceso desencadenó esto?
Debo decir que cuando este libro me
llegó pensé que era una novela de suspenso, no tengo la más mínima
idea del porque la portada me pareció de suspenso, pero nada que
ver; Bajo el agua es más bien una historia de superación, de
aceptación y de liberación, es una historia que abarca muchos
temas, siendo el principal la negativa de la protagonista a tener una
vida fuera de su hogar pero no el único, también habla sobre la
aceptación del pasado y de las desiciones que nos llevan a donde
estamos y sobre la reconciliación con ese pasado para su perdón y
superación, realmente es muy difícil hacer esta reseña pues este
es uno de esos libros de los que es mejor no saber nada para
disfrutarlos mejor. Yo, personalmente, no soy una persona afecta a
salir de casa (tengo la gran fortuna de trabajar como freelance desde
mi casa sin necesidad de moverme a una oficina) y no me llaman la
atención las salidas nocturnas o ir a beber, siempre he sido así,
pero no significa que tenga algún problema con salir, puedo hacerlo
si algo me llama la atención o eventos que sean de mi agrado pero en
general no lo hago, así que a veces el libro me chocaba porque era
en plan de no salir= enfermedad social. No creo que las cosas sean
negras o blancas, cada persona es un mundo y quizás si sufro de algo
de fobia social pero tampoco interfiere con mi vida, es una cuestión
de personalidad arisca y ya está, hago hincapié en esto porque una
persona más joven puede dejarse influenciar con esos famosos
“estándares sociales” de como deben ser las cosas y no entender
que las personalidades pueden ser diferentes unas de otras y que
todas las personas somos mega diferentes. Conozco personas que apenas
ponen un pie en su casa, otras que salen menos que yo, otras que
salen a trabajar y se pasan el fin de semana encerrados, etc. No hay
buenos o malos, cada quién hace lo que puede y quiere.
Ahora bien, en cuanto al libro en si
mismo no puedo decir que me encantará, si me gustó la forma en que
se entrelazan diversos temas mostrando varias críticas sociales,
pero la protagonista me pareció demasiado sosa, victímista y la
forma de solucionar el problema principal fue, por lo menos para mí,
decepcionante. No vi un crecimiento en la protagonista, no vi una
evolución en su personaje, fue como me quiero sanar y ya pum estoy
bien, y hasta dónde yo sé este tipo de procesos duran años, además
se supone que ella no salia porque tenía miedo del mundo pero apenas
ve un chico guapo confía en el inmediatamente, igual es cosa mía
pero la vida no suele funcionar así y no todas las historias tienen
finales felices, creo que la novela pecó de falta de realismo, al
endulzar tanto un trastorno psiquiátrico y convertirlo en una
solución tan simple como: encontrar novio. ¿Qué no puedes salir de
tu casa y tienes miedo del mundo? ¡Encuentra un guapo novio
surfista! En lugar de mostrarnos un proceso real, largo, crudo y a
una protagonista que creciera, evolucionara, aprendiera, cayera y
volviera a levantarse, nos dieron a una chica patética que supera un
gran trauma en cuestión de un par de capítulos y que se enamora del
primer chico que le habla bonito...Lamentable.
En resumen, Bajo el agua es una
historia que intenta ser dramática, que tiene elementos de crítica
social bastante interesantes pero que se ven opacados por la mala
construcción de la historia, los personajes y las situaciones. Es un
“quiero pero no puedo” y queda en una historia de romance juvenil
dotada de algo de drama y frases profundas que engañan al lector
para creer que estas leyendo algo bien construido pero que al final
se hunde. Entretenida si que es pero nada más.
¡Felices Lecturas!
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